Al mal tiempo, fullbody en el gym.
![]() |
Selfie en el press de banca en el gimnasio vacío |
Que bien queda ese titular con ínfulas sajonas, que si fullbody o gym para parecer más moderno, que si selfie para el pie de foto. Y repasando tags de este blog (más anglicismos) me doy cuenta que la única entrada en la que he mencionado el gimnasio es de marzo de 2009… cuando ni tan siquiera tenía Garmin. No voy a ponerme nostálgico pero repasándola me doy cuenta de que al menos aparentaba entrenar mucho más de lo que lo hago ahora, y eso que estaba saliendo de una lesión de cintilla. Eso sí, vaya pinticas me llevaba en la foto que escogí para ilustrar la entrada con toda la equipación del principiante comprada en Decathlon.
![]() |
Las pinticas del 2009 |
El caso lectores casuales, anónimos y quizás desinteresados en mi vida y que por los avatares de Google o vete a saber qué habéis llegado a esta entrada hoy ha estado lloviendo toda la mañana y yo tenía pensado salir en bici con mi compa de fatigas Paco. Después, vía WhatsApp a las 7 de la mañana hemos cambiado de planes por lo de salir al running y después, como seguía lloviendo mucho, hemos decidido que ni una cosa ni otra. Atrás quedan esas sesiones espartanas en las que se entrenaba lloviera, nevara, ventara o granizara. O nos hemos ablandado, o nos hemos vuelto más cuerdos o creemos que no vale la pena para como está la cosa. Pues que sepáis que ni una cosa ni otra ni la tercera.
He acabado haciendo algo diferente a disfrutar de un amanecer suave e inesperado en la cama y he decidido no perder una sesión de entrenamiento. Me he ido al gimnasio que para algo pago el abono desde hace ya varios años. Si cuento las veces que lo he aprovechado resulta que la media entre lo que cuesta y lo que lo utilizo es superior a una entrada para el gimnasio más elitista de la parte alta de la Diagonal de Barcelona.
A lo que iba. Me he cascado poco más de una horita en un gimnasio en el que solo he coincido con una señora durante un cuarto de hora, después ha sido todo para mi, para que me pudiera mirar bien al espejo sin pasar vergüenza, pero no lo he hecho. He pasado vergüenza. Para empezar no me acordaba ya ni de los pesos qué poner en las máquinas y guiándome un poco por el sentido común al final resulta que he acertado bastante.
Un poco de bici estática para calentar y 6×12 repeticiones de ejercicios de esos a los que les llaman fullbody, para entrenar varios músculos a la vez y que todo sea más completo. Press de banca, jalón al pecho y sentadillas. Mi intención no es pasar allí demasiado tiempo pero si poder aprovechar el tiempo que paso. Veremos a ver cuantas sesiones consigo rascar a la semana o al mes para hacer únicamente ejercicios fullbody.
Por lo demás esta semana he ido otra vez a la piscina pero solo para meter la puntita. Me hice 1.000 metros y comprobé (one more time) que nado como los peces de plomo y que la sauna y el jacuzzy siguen funcionando bastante bien. También supe que tengo músculos en mi tren superior que hacía meses que pasaban desapercibidos.
Por cierto, que esta semana creo que es la que hay consenso en lo de acabar con la temporada de triatlón, así que, adiós temporada 2015/16 y hola temporada 2016/17