De clic fácil, apuntándome a un montón de carreras
Aprovechando este largo y sostenido periodo de entreno regular era tan solo cuestión de tiempo que empezara a engorilarme apuntándome a distintas pruebas de las que tenemos por aquí cerquita. Así que mi mano se ha vuelto de clic fácil y no me ha quedado más remedio que ir apuntándome a competiciones para volver a revivir que es eso de ponerse regularmente un dorsal y de paso también aprovechar la competición para probarme en los ritmos más altos.
Lo más inminente es La Sansi de Viladecans, así, a la brava, este mismo domingo 11 de diciembre. Mi intención es hacer un 10K algo ligero de ritmo, o sea, para comprobar lo que puedo aguantar. Fue aquí donde hice hace ya bastantes temporadas mi mmp en 5K aunque no volveré a repetir la distancia.
La segunda prueba es la clásica Cursa dels Nassos de Barcelona el 31 de diciembre por la tarde para ir haciendo sitio a las uvas. Una carrera que ya he corrido en varias ocasiones y que me hace mucha ilusión volver a repetir. Además, con los resultados de La Sansi de Viladecans podré jugar un poquito para saber si aguantaría o no.
El 15 de enero de 2017, con el nuevo año, correré la Mitja Marató de Sitges, otra de las pruebas que he corrido en varias ocasiones. Lo haré casi un año después de mi último medio maratón en Gavà, así que la intención será la misma que con los 10K de esta semana, comprobar lo que puedo aguantar y tener una primera referencia de tiempo. Años atrás iba a correr esta carrera en bicicleta desde casa y después vuelta por el mismo camino pero creo que este año no lo haré…
El mismo mes de enero, el día 29 estoy apuntado para correr el Duatló de Granollers en el circuit de Montmeló. Recuerdo la prueba con especial cariño porque competí en la primera de las ediciones, cuando llevaba ritmos más altos que los de ahora. Desde entonces la prueba ha ganado bastante popularidad y tiene el aliciente de que el Gavà Triatló se ha apuntado en masa a esta prueba.
Por último el 21 de mayo estaré en la Gran Fondo la Mussara de Reus. También fue una de las pruebas en las que participé en su primera edición. La principal diferencia es que por aquel entonces lo hice en la distancia corta y en esta ocasión me he apuntado a la distancia larga. Serán 189 kilómetros y 3.200 metros de desnivel que me dan mucho respeto. He ido por esas carreteras en varias ocasiones y es un circuito de dientes de sierra, rompepiernas para el que espero poder tener tiempo para prepararme. Quizás sea uno de los momentos más importantes de esta temporada.
Hasta el momento estas son todas las pruebas de mi calendario que va ampliándose. Todas tienen varios alicientes y ventajas: las conozco de haber participado anteriormente, me motiva el volver a verme en forma para competir y me sirven como nuevo punto de partida para empezar a conocer mis ritmos en competición. Y la ilusión de volver a escribir las crónicas…